¡Mis
estimados contlapaches! ¡Hasta salpullido me ha salido de la emoción de poder
contactaros de nuevo!
Pues
aquí de nuevo, escribiendo con mi sombrerito de palma arrugado tipo Gaspar
Henaine “Capulina”, buscando la inspiración que a momentos, parece una amante
ingrata y celosa, porque se desaparece por largos periodos de tiempo; hay veces
en que utilizando ciertos artefactos, uno puede lograr efectos que rayan en la
magia, y si no, pregúntenle a los deportistas… ¿Cuántos casos no hemos visto de
que cierto jugador, si no se pone unas viejas y sudadas calcetas, o una playera
vieja y llena de hoyos, no puede dar lo mejor de sí en cierto partido? Pues lo
mismo sucede con este gato, después de largos periodos de abstinencia creativa:
este sombrerito de paja tipo Panamá siempre me ha ayudado a concentrarme. Entra
el Hemingway que todos quisiéramos tener, por lo menos, todos los que aspiramos
a juntar un par de enunciados con creatividá para contar cosas.
Más en
estos momentos, que flota en el ambiente la enajenación del día del “Amor y la
Amistá”, del tipo comercial, se entiende. Las calles y los negocios están
llenos de empalagosos corazoncitos rojos que me hastían, por ser un ente solitario.
No, camaradas, no me malentiendan, disfruto y mucho mi soledad, es sólo que ver
tanta miel en un momento dado empalaga y es de mal gusto, se me figura que es
como contar el dinero delante de los pobres. Y eso, bien que mal, me quita el
gusto por escribir y por hacer cualquier cosa. La depre se hace presente al no
contar, como el Rey David, con una piel joven que le caliente a uno los huesos,
y hasta que no salgamos de tan deplorable estado, es decir, hasta que el
calendario no cambie al 15 de Febrero, que es considerado como el “Día de los Amantes” (una fecha más de mi
gusto), esta modorra mental no se me quitará. Así que he de recurrir a la magia
que posee este ítem mágico y poder intentar juntar con algo de creatividá este
par de enunciados que son la entrega de este mes. ¿En dónde nos quedamos? Déjenme revisar… ¡Ya,
aquí está! El Aguilita descubre horrorizado el plan de los nahuales para traer
a su bwana patrón maestro a éste
universo; cae vencido por la hija del
nahual Ixtlicóyotl, líder de los adoradores de Tezcatlipoca y está a punto de
sucumbir cuando entra en escena el joven capitán Sánchez, el cual es asesinado
por Ixtlicóyotl. La situación se torna desesperada cuando entra en escena
Cuauhtémoc Tetepa y Juan Tochtli, tlamahuichihuanis de la orden de
Huitzilopochtli (es decir, Campeones Águila o como se les conoce comúnmente,
“Caballeros – ¡Eh! ¡Que en el México
antiguo no había caballos! – Águila”) cayendo en combate el valeroso Juan
Tochtli. Ixtlicóyotl, ante las heridas recibidas por los tlamahuichihuanis,
cuando ve entrar al comandante García con el grueso de la tropa, decide escapar para no poner en riesgo la ceremonia de “Ilhuicahua Tezcatlipoca” con la que
traerán a su mentor a este universo. (¡Uf
uf!) ¡Vayamos ahora a la parte final de este Códice Nueve!
¡Hijajayyy!
¡Se nos termina Tzitzimine! ¡En la entrega que sigue, comenzaremos con el
Códice 10, el gran finale degustoso! Como dirían en la publicidad de las
telenovelas mexicanas: “rumbo al gran
final” ¡Já ja ja!
Todo
final de historieta trae consigo una gran angustia. O por lo menos a mí me
pasa. Uno se pregunta si se estará al nivel, si el dibujo que uno tiene será el
adecuado para llevar a buen puerto tal empresa, si la capacidad propia para
diagramar será la adecuada, en fin. Tuve que parar un momento y calcular bien,
ya que su seguro servilleta hizo de todo aquí: diseño, diagramación, lápices,
entintado, ¡y quería hacerlo bien! ¡No en balde era un proyecto donde había
invertido tanto tiempo y esfuerzo y capital también! El resultado, si fue
satisfactorio, ustedes me lo dirán, estimados camaradas que me hacen el gran
favor de seguir éste humilde cojín.
Y
bueno, mi computadora sigue descompuesta. Y en estos momentos, me hallo
trabajando en esta humilde lap que un alma buena regaló a mi hermano H.P., que
aunque lenta sirve muy bien para escribir; así que he decidido, en lo que
podemos reparar a Chihiro, seguir en esta la hechura de “Hadas”, que ya va en
su capítulo final. Y al igual que con la historieta, me genera dolores
estomacales… ¿Estará uno al nivel esperado? ¿La forma de narración será la
adecuada? Además, también es un proyecto muy largo, y me agradaría mucho poder
publicarla, lo que trae nuevos dolores de cabeza y estomacales, al tener que
enfrentarse a los editorialistas y libreros, en su mayoría, salvo gloriosísimas
excepciones, gente que por cuidadosa, cae en la cuadratura de rechazar casi
cualquier cosa. Me da un poco de miedo, realmente. Afortunadamente, y gracias a
la tecnología, uno ya no está amarrado a los formatos físicos, y éste Cojín es
prueba fehaciente de ello, así que saldrá, por un medio u otro.
La cosa
es no dejar de escribir. Y regresando al asunto del “Día del Amor y la Amistá”,
les ofrezco una rimilla que hice sobre los amores desgraciados, los que hay más
en esta vida. Espero que les guste:
8 de Febrero de 2015.
Este caracol tiene tiempo
Que camina sobre arena,
Inmensa tierra sin senderos,
Cada grano es un diente, una muela
Que le provoca fiebres,
Que le deja seco
Y en un momento que ya es eterno
Deja de ser caracol,
Es un pedacito de madera.
Es un varado barco que navega
Prendido en llamas, fuego es su vela
Que no enciende ni al viento ni a la tierra
Sino a su propio casco seco, de madera.
Cansado, quiere meterse dentro de la tierra,
Sólo una puntita que descanse apenas;
Pero este mar, esta tierra,
Fría al tacto, indiferente y seca
Le niega molesta el cobijo,
Lo colma sólo de esperas…
Parece, en un momento, abrir un surco,
Una pequeña esperanza
Para cerrarla inmediatamente, grosera.
Este pequeño caracol
Es un ardiente corazón
Que necio, te desea,
Inmensa tierra
Que alguna vez creyó fértil y buena
Y ya no espera…
Quemó sus naves, ardieron sus banderas
Creyendo vivir bajo este sol,
Comer de esta tierra que calcina su armazón.
Ya no tiene ni su esperanza,
Porque esta tierra está llena
De fantasmas y almas en pena.
Por ello se niega a abrirse a éste caracol,
Por ello se niega a albergar su corazón
Que ya no ruega…
Porque sabe bien que a ella le pesa
Sentir la húmeda caricia por su tierra;
Sabe que asco le causa la idea
De que él se hunda plenamente
En el seco, muerto vientre
De esta bella arena.
Caracol, ya no tienes fuerzas.
Incapaz de moverse, espera, aún espera
Ya no a la amada, sino a la luna y las estrellas
Ya que comprende que el desierto
Rechazará mezclarse incluso con sus muertas moléculas.
Incapaz de seguir,
De ella ya no espera,
No le ruega.
Míralo, es un raro ser
Hecho de carbonizada madera.
¿Qué
les pareció? Es lo único que he podido escribir, y creo sinceramente que ya no debiera
tocar ésos temas, pero se me vienen solos… De hecho, lo único que he intentado
hacer, es describir con palabras un par de imágenes que se me vienen a la
mente. En fin.
En
otros temas, la situación de la nación mexicana sigue de mal en peor. Indignante
la actuación de los representantes del gobierno ante la ONU al guardar
cínicamente un minuto de silencio por los chicos de Ayotzinapa; representantes
de un gobierno fascista que públicamente lamenta y deplora los hechos de la
Normal Rural, pero que por el otro, calla y prohíja una corrupción que permite
la existencia de grupos delincuenciales en extremo violentos, casi al mismo
nivel que los ISSIL. Que tolera que instituciones públicas, como el ejército,
la marina y la policía se dediquen a extorsionar y a torturar; que adultera
pruebas y destruye escenas del delito para que nadie pueda, en un futuro
cercano, saber la verdad de los hechos. Que nombra a amigos como cancerberos
del orden público como el caso del jefe de la Contraloría, para que se hagan de
la vista gorda ante sus abusos, y que libera a criminales como la Reina del Sur
y a Elba Esther Gordillo. Que finge campañas enfocadas a eliminar el hambre,
pero de una manera únicamente estética cuando basta caminar por cualquier calle
para notar la cantidad de gente que pide limosna. El país está podrido, y la
única forma de salvarlo sería crear una nueva república. Y no lo digo sólo
porque el maestrazo Toledo, Javier Sicilia y el padre Solalinde lo dicen. Si
revisan éste Cojín, verán que soy de ésa opinión desde hace mucho tiempo. Y el
último abuso: el encapsulamiento de la marcha de los profesores de la
Coordinadora. Y que conste que no son santos de mi devoción, pero si hace un
año no les pagan su jornal, creo que en vez de mandar a los granaderos y a la
gendarmería a disolver sus manifestaciones, debería éste gobierno mandar gente
a investigar quién se está haciendo rico con el salario retenido de los
profesores, y encarcelarlo por fraude y enriquecimiento ilícito, y pagarles
inmediatamente. Y el gobierno de la Ciudad de México, dizque de izquierda
progresista, manda gente al más puro estilo Franco y/o Pinochet a evitar un
derecho consagrado en la Constitución: La Libre Expresión.
Y si,
sé que quizá al rato ronden automóviles negros cerca de mi casa por mis
comentarios, y sé que quizá, me bloqueen éste Cojín, ya que está de moda
acallar cualquier voz disidente, pero mientras se pueda, deberemos comentar la
siniestra situación de ésta patria a la que uno ama. Si no fuese esto cierto,
sencillamente uno se quedaría callado. En fin, camaradas, que llegó el momento
de despedirse. ¡VIVOS SE LOS LLEVARON!
¡VIVOS LOS QUEREMOS DE VUELTA! ¡SI EL PRESIDENTE NO PUEDE CON LA VERDAD, O NO
QUIERE, QUE RENUNCIE! ¡Hasta la entrega que viene, camaradas y camarodos!
¡Sayonara! ¡AUNQUE LA AUTORIDAD LA EXCOMULGUE, LA PROTESTA SOCIAL NO ES DELITO! ¡EL
INTERNET AL SER DERECHO HUMANO, DEBE SER ABIERTO Y LIBRE! ¡HISTORIETA O MUERTE!
¡VENCEREMOS! ¡HASTA LA ENTREGA QUE VIENE!