jueves, 21 de agosto de 2014

Histerieta: “Los Que Cayeron de Cabeza” 31ra entrega + Pintura de Caballote: “La Bruja”




¡Hola a todos! ¿Cómo han estado?

                Pues uno por estos lares, peleándose con la realidad como siempre. Uno quisiera, en serio, que la vida fuese como la pintan los comerciales. Fuera de broma, sería agradable que con nomás comprar un desodorante o un sartén, la vida fuese en verdad feliz, y que no ocurriesen eventos como el “fracking”, que no pasaran cosas como la apropiación de un bien soberano como el petróleo, que nadie, absolutamente nadie tuviese la patente de un gen o de una semilla, como pretenden los señores de Monsanto. Que nuestra vida dependiese de nuestro arrojo y de la fuerza de nuestros brazos, que aún hubiesen doncellas en peligro, y dragones, y caballeros andantes.

                Sería bueno, en serio. Uno piensa que en la vida real los dragones no existen, y que sería muy absurdo que alguien saliese a arreglar los asuntos con la espada en la mano. ¡Ah! Pero… ¿Será cierto que los dragones no existen? ¿No será más bien que uno se siente muy cómodo en nuestro paraíso artificial llamado ciudad? Fuera del asunto de que muchas culturas apuntan en sus relatos antiguos a seres escamosos y a veces, escupidores de fuego, semejantes a los dinosaurios, culturas que van desde la polinesia hasta nuestro mexicanísimo Quetzalcóatl, “La Serpiente Emplumada”. Y a veces las semejanzas son tantas que uno se pregunta seriamente que quizá en realidad si existieron ésos seres destructores de aldeas y que de alguna manera, o se extinguieron o siguen dormidos en algún lugar, y que los huesos de dinosaurios que conocemos en realidad no son de dinosaurio, sino de dragón, y que la ciencia, siguiendo el camino que la filosofía le marca, cree que ve dinosaurios cuando en realidad serían dragones, y que estamos muy lejos de imaginar que en realidad no se extinguieron hace tantos millones de años (el carbono 14 es fiable sólo hasta cierto punto: basta con que la muestra esté contaminada con cualquier grasa o polvo para que la lectura sea incorrecta, además de que a mi humilde parecer, hay un error de interpretación de datos: el compuesto químico que se mide puede reflejar la edad en que el mismo material se hizo a nivel atómico, y no de cuando el supuesto animal caminaba; es decir, que nos muestra la edad en que alguna estrella fabricó dicho mineral, y que éste mineral, después de un tiempo, se unió a algún hueso), sino que quizá, hace apenas cuatro mil años seguían caminando entre nosotros hasta que el Diluvio Universal los destruyó… Pero su espíritu sigue aquí, dando guerra.

                Y bueno… Uno cree que se murieron, o que no existieron. Pero una cosa es el hueso de un dragón, y otra muy distinta su espíritu que camina libremente, sin la carga el cuerpo y decidida a poseer a otros seres, igual de malvados que Tiamat. En la actualidad seguimos peleando contra varias Hidras: Hay un par que me preocupan particularmente: una se llama Monsanto, que es una de las múltiples cabezas de un monstruo mucho más grande (me parece que es Dupont, corríjanme si estoy en un error) que cree poder controlar la alimentación a nivel planetario al introducir semillas alteradas genéticamente. Fuera de la discusión de que si son cancerígenas (que me parece que si cien ratas de laboratorio que contrajeron cáncer al ser alimentadas con trigo y maíz transgénico son suficiente prueba), lo terrible es que nadie podrá comerciar con dichas semillas libremente, ya que estarán protegida por un código Copyright; es decir: si vendes semillas de ésas o siembras semillas de ésas sin permiso, serás un ladrón pirata y condenado a cárcel. Aterrador, ¿no? Imagínense el mercado mundial de alimentos controlados por éste dragón semejante a Smaug a quien únicamente le interesa el poder enriquecerse y a quien no le importa nada el derecho a la tierra ni los derechos de los campesinos y/o indígenas y sus formas de organización milenaria.

                El otro es la Hidra Petrolera. Este siniestro dragón estuvo dormido en México durante mucho tiempo, desde que un Caballero de Armadura Popular lo durmió. ¿El nombre del campeón? Lázaro Cárdenas del Río. Pero ahora un duende siniestro y copetón lo ha despertado con la Reforma Energética, aprovechando la desinformación que otra hidra, la de las telecomunicaciones (Televisa y TV Azteca), ha esparcido en todo el país por medio de telenovelas y partidos de fútbol. El antiguo poder que permitió al Caballero de la Armadura Popular pelear contra éste dragón que se alimenta de gas natural y petróleo está fragmentado por varios factores como la inestabilidad del trabajo (en México la gran mayoría teme perder su empleo ante el empuje de la masa desempleada que busca un lugar) y dicha desinformación. Basta ver un ojo de la hidra televisiva para ver cómo se han incrementado los anuncios gubernamentales del duende copetón diciendo “¡infórmate! ¡La Reforma Energética te beneficia!”; una mentira dicha mil veces deja de ser mentira para convertirse en verdad, como bien sabía otro dragón: el fascista. Siendo pragmáticos, no habría mayor problema si nuestras autoridades no fuesen tan corruptas y los metieran en cintura, protegiendo a la población y obligándoles a pagar impuestos, a cuidar el medio ambiente y a pagar buenos sueldos; desgraciadamente el poder y las cámaras están llenas de enanos ambiciosos, trolls y duendes que hacen sólo lo que les dice el presidente del partido-duende, partido-troll o partido-enano al que pertenezcan, permitiéndole no sólo a la Hidra Petrolera, también a otras hidras como la del narcotráfico y la de trata de personas, hacer lo que les plazca. Será que estos seres que se creen fantásticos no tienen sentido común y no son capaces de pensar por su cuenta. Mientras los dragones les den dádivas y migajas de toda la riqueza que se apropian, lo demás no les importa.

La Hidra Petrolera utiliza un maligno poder llamado “fracking” para extraer del suelo el petróleo y gas natural: éste poder llamado “fracking” no es otra cosa que mezclarle al agua ácidos y arsénico para partir las rocas profundas y romperlas. Ésta agua corrosiva se inyecta a gran presión dentro de la tierra y genera túneles por donde escapa el gas; lo malo de éste método, que consume el agua potable de las poblaciones cercanas, es que también contamina los mantos freáticos alterando los ecosistemas y poniéndolos en riesgo. Al dragón petrolero no le importa quemarlo todo en su ambición, y mientras nuestras instituciones estén dominadas por enanos ambiciosos y duendes sinvergüenzas, corremos un peligro inimaginable en los años por venir. Una muestra: las leyes que se acaban de aprobar para beneficio del Dragón, llamadas Reforma Energética, permiten que si se encuentra petróleo o gas natural en algún sitio, así sea el Zócalo de la Ciudad de México o una zona arqueológica o colonial, van a poder explotar dichos yacimientos y deberán pagar un raquítico 2% de la riqueza extraída al dueño de la tierra, 2% que puede bajar dependiendo de las artimañas del dragón y su cuerpo corrupto de abogados: pónganse en el lugar de un hobbit campesino, que vive de vender su siembra. De pronto, hallan petróleo en su ejido y la hidra petrolera comienza a explotar dicha tierra dejándola inservible por los contaminantes. ¿Podrá seguir sembrando  ése hobbit campesino ésa tierra muerta y contaminada? ¿Le alcanzará ése 2% para su vejez y la de sus descendientes? Ésa es mi preocupación, camaradas. Se acaba el campo, se acaba la alimentación, ¿y qué vamos a comer? ¿Petróleo? Es verdad, ya comemos petróleo: algunas frituras como los famosos “Chitos” están hechos con polipropileno.

¿Se levantará algún campeón que pelee contra semejantes monstruos? Las únicas armas capaces de mellar la coraza de escamas de dichas hidras son la unidad popular y la información. Las aguas parecen agitarse, y espero por el bien de las generaciones futuras, que no se alce únicamente un campeón, sino cien, mil Caballeros de Armaduras Populares y les hagan la guerra a estos seres malignos. ¡Soñar no cuesta nada!

Y hablando de campeones que luchan por que el mundo no estalle en pedacitos, tenemos al Aguilita, ¡en el final del Códice 8! ¿En qué nos quedamos? ¡Ah, en que Aguilita acaba de mandar un helicóptero para que recoja a Cuauhtémoc Tetepa y a Juan Tochtli, y otro para él mismo y el Comandante García para ir hacia Texcoco, donde aparentemente se halla el líder de los Nahuales, Juan Ixtlicóyotl!







                ¡En la página 27 cometí el error (en el original) de dibujar el símbolo de la Fuerza Aérea Mexicana al revés! Afortunadamente, la computación es muy semejante a la magia en ésas cuestiones, ya que me permitió corregir ése furcio posteriormente. ¡La bronca va a ser pesada! ¡El Ejército y la Fuerza Aérea se han comenzado a mover! ¡También detuvieron el helicóptero biplaza de Andrew! Cuauhtémoc tiene hambre de venganza por su hijo asesinado… ¡El Dr. Yazz-Ot-Tsé haciendo gala de sus habilidades en la meditación trascendental se halla repuesto y listo para seguir la peligrosa investigación! ¿Qué se hallarán en Texcoco? Quizá sólo Ipalnemohuani lo sepa… O quizá nosotros también, pero en el Códice 9, ¡en la siguiente entrega!

                Una nota rápida sobre Ipalnemohuani: Alfonso Caso, en su libro “El Pueblo del Sol”, habla de un poder supremo que es el creador de los dioses prehispánicos. Éste ser que nadie conoce, y a quien Netzahualcóyotl, el rey poeta y sabio de Texcoco nombró “El Dador de la Vida” es reconocido únicamente por las clases sacerdotales y gobernantes más altas, como corrobora León Portilla en varios textos, y quien poca gente de la antigüedad adoró. De hecho, Netzahualpilli, el hijo de Netzahualcóyotl, alza un altar en la plaza principal de Texcoco, cuando –me parece- Moctecuzoma Xocoyotzin, el emperador mexica, prácticamente obliga al rey texcocano a poner un altar a Huitzilopochtli. 

                Y bien, siguiendo con nuestro negocio, quisiera ofrecerles un último dibujo que he hecho, ¡enteramente con café! Alguna vez vi en Youtube un video que mostraba a una artista haciendo un rostro con gotas de café sobre un lienzo, y como me quedé con ganas de hacer algo así, decidí aprovechar un pliego de papel Fabriano que conseguí para dedicarlo a ésta idea que me ronda en la cabeza: una bruja:


 

                ¿Cómo quedó? Está algo arrugada, por la humedad, y como no es muy grande, (apenas tiene 50x40 cms.) en vez de hacerla por medio de gotas la hice con pinceladas, cada vez haciendo el café más intenso, para rematar con una plumilla para los detalles. Acá el proceso:



                Este es el boceto preliminar en una hoja de papel bond carta y dibujada con lápiz 2B.



                Este es el boceto a lápiz sobre el papel Fabriano.
 


 
La primera capa de café.



                La segunda capa de café.
 


                La tercera capa de café.
 


                La cuarta capa de café. No hay mucha diferencia con el anterior, salvo detalles.




                Esta es la quinta capa. Se ve más clara por el flash.
 


                Y esta es la sexta capa de café. Lo que siguió fue darle con la plumilla y el café más espeso que haya hecho mezclado con un poco de carboncillo de uno de mis lápices. La siguiente foto ¡es mi caballete y las flores que me trajeron mis kalachanitos!



                ¡Un poco caótico el espacio donde pinto, es verdad! Espero que les haya gustado “La Bruja” y nos vemos la entrega que viene, con el inicio del Códice 9. ¡Sayonara! ¡AUNQUE LA AUTORIDAD LA EXCOMULGUE, LA PROTESTA SOCIAL NO ES DELITO! ¡EL INTERNET AL SER DERECHO HUMANO, DEBE SER ABIERTO Y LIBRE! ¡HISTORIETA O MUERTE! ¡VENCEREMOS! ¡HASTA LA ENTREGA QUE VIENE!